linea de tiempo

APORTE DE JEAN PIAGET (1947)

1947 BCE

Aunque uno sea educador hasta la médula, tiene que conocer no solo las materias que enseña, si no el propio niño al que se dirige.
Las concepciones infantiles se deben mirar dedicadas a su tiempo, espacio, capacidad que tiene cada niño e su movimiento velocidad madurez de cada niño los niños entre más compartan con otros niños los ayuda a desarrollarse mejor. .

APORTE DE OVIDE DECROLY

1932 BCE

También el medico belga Ovide Decroly (1871-1932) empezó ocupándose de niños anormales, (en beneficio de los cuales creo en 1901 una escuela en su misma casa, para luego abrir un instituto para niños normales, justo en el año en que María Montessori fundaba su primera casa del niño (1907). La nueva escuela se llamó École de l´Ermitage por el nombre de la calle de Bruselas donde surgió.

APORTE DE MARIA MONTESSORI

1909 BCE

Expuso (año 1909), las experiencias realizadas y sus resultados en el libro “EL METODO DE LA PEDAGOGIA CIENTIFICA” aplicado a la educación infantil en las casas de los niños y más tarde planteó y promovió la aplicación de sus métodos en las escuelas elementales, Montessori misma dedicó gran parte de su vida a cuidar su trasplante en países extranjeros (como la india y la china), mientras en Italia la corriente idealista predominante le oponía ciertos obstáculos.

APORTE DE PLATON A LA EDUCACION

428 BCE

Platón nos muestra la existencia de dos mundos el sensible y el intangible, en donde el mundo sensible se puede percibir por medio de los sentidos, y el intangible que es lo que no se ve, ya que está conformado por las ideas y posee una realidad objetiva, que existen por fuera de las mentes que lo albergan. (427-347 a.c.)

APORTE DE LA MITOLOGIA GRIEGA

428 BCE

Cuando el niño aprende a hablar, no aprende a designar cada cosa con una palabra, como se cree comúnmente, sino que más bien aprende a identificar en las cosas, a través de las palabras, la posibilidad genérica de uso que las define. Por ejemplo cuando la madre dice, “este es un tenedor”, lo que le enseña no es tanto la palabra en si misma cuanto la relación existe entre la palabra y toda una serie de objetos (todos los tenedores posibles, cualesquiera que sea su forma, tamaño).