Vino tinto

  • Recepción y selección de uvas

    Las uvas cosechadas se transportan a la bodega.
    Se realiza una selección manual o mecánica para eliminar uvas de mala calidad.
  • Despalillado y estrujado

    Las uvas se despalillan, separan los raspajos y se estrujan para romper las pieles y liberar el mosto.
  • Maceración y fermentación

    El mosto y los hollejo se dejan macerar y fermentar juntos en tanques. La fermentación alcohólica convierte los azúcares en alcohol y se extraen los compuestos de color y sabor de las pieles.
  • Prensado

    Al finalizar la fermentación y maceración, se prensa el vino para separar el líquido de los sólidos.
  • Fermentación malolactica

    El vino se somete a una fermentación secundaria, donde las bacterias lácticas convierten el ácido málico en ácido láctico.
    Este proceso suaviza la acidez del vino y añade complejidad.
  • Trasiegos y clarificación:

    El vino se trasiega para separar las lía.
    Se pueden añadir clarificantes para mejorar la claridad del vino.
  • Crianza

    El vino tinto puede pasar por una crianza en barricas de roble o en tanques de acero inoxidable.
    La crianza puede durar desde unos pocos meses hasta varios años, dependiendo del estilo de vino.
    Durante este tiempo, el vino adquiere complejidad y estructura.
  • Filtración y embotellado

    El vino se filtra para eliminar cualquier impureza restante.
    Se embotella en botellas de vidrio.