Escolástica, Humanismo y Renacentismo

  • 1220

    Roger Bacon

    Roger Bacon
    Filósofo, científico y teólogo inglés cuyos acercamientos a la ciencia desde una perspectiva experimental preludiaron la crisis que experimentaría en el siglo siguiente la filosofía escolástica. Sus principales obras fueron Opus maius, Opus minus y Opus tertium, el consideraba que la fuente del conocimiento partía de dos vertientes la razón y la experiencia de ahí que empezará a reconocer la importancia de la ciencia experimental.
  • 1285

    Guillermo de Ockham

    Guillermo de Ockham
    Teólogo escolástico inglés, fundador de la escuela nominalista, estudió en la Universidad de Oxford. Su filosofía parte de la crítica al racionalismo y a los conceptos universales: todo conocimiento está basado en la lógica, operando sobre la percepción sensorial de objetos individuales concretos, y no deben multiplicarse inútilmente los entes creando conceptos abstractos que no procedan de la experiencia esta economía de objetos se le llamo la navaja de Occam.
  • Nov 8, 1308

    John Duns Escoto

    John Duns Escoto
    Filósofo escocés. Estudió en París y más tarde se trasladó a Oxford. Sus textos más importantes son los Comentarios sobre las Sentencias. En cuanto al obrar del hombre sostiene que la voluntad es la causa total de los actos voluntarios. No niega la intervención del intelecto, porque debemos conocer algo para quererlo, pero afirma que, si bien las ideas determinan la voluntad, previamente la voluntad determina la elección de esas ideas.
  • 1331

    Coluccio Salutat

    Coluccio Salutat
    Nacido junto a Lucca y educado en Bolonia, se formó en la escuela de retórica del amigo de Francesco Petrarca, Pietro da Muglio, y se convirtió en canciller de Florencia en 1375, él reconoce la superioridad de las leyes sobre la medicina y en general sobre las ciencias de la naturaleza, y su concepto d historia es la de una disciplina educadora de la humanidad.
  • 1369

    Leonardo Bruni

    Leonardo Bruni
    Aunque su familia era Toscana, se trasladó a Florencia, de forma que Leonardo se convirtió en ciudadano florentino en 1416. En Florencia aprendió retórica y entabló amistad con los humanistas Niccolò Niccoli, Poggio Bracciolini y Palla Strozzi, dentro de los aspectos más importantes a resaltar es la revaloración del pacer para el buen vivir.
  • Jun 5, 1396

    Giannozzo Maneti

    Giannozzo Maneti
    Fue un humanista italiano dedicado especialmente a la filología. Además, desarrolló encargos como político y diplomático de Florencia, de él se rescata la reflexión de que la tarea del hombre se define por la formula agere et intelligere, que quiere decir “saber y poder gobernar y regir al mundo que fue hecho para el hombre”.
  • 1406

    Lorenzo Valla

    Lorenzo Valla
    Fue un humanista, orador, educador y filósofo italiano, considerado el pionero de la crítica histórica y filosófica, primo del también humanista Giorgio Valla, defiende el placer como el único bien del hombre, retoma la lengua latina como signo del espíritu romano y reivindica la libertad de la vida religiosa contra los reglamentos medievales.
  • Apr 15, 1452

    Leonardo da Vinci

    Leonardo da Vinci
    va sentar las bases de la ciencia moderna al fundamentarla con la experiencia sensible y que esta procede de la hipótesis. El afirmaba que la sabiduría era la hija de la experiencia, ya que la experiencia no engaña, esta forma de ver la sabiduría parte de que en su juventud fue discípulo de artesano y por ello le da tanta importancia a la experimentación y realización de trabajo sobre la teoría.
  • May 3, 1462

    Nicolás Maquiavelo

    Nicolás Maquiavelo
    En la primera lección de su obra el príncipe, distingue entre la política, la moral y la religión y establece que una conciencia política no es mala ni buena moralmente sino justificable sí es conveniente para el pueblo, es lo que conocemos como “el bien justifica los medios Se podría decir que Maquiavelo propone una visión multidisciplinar que enriquece sobremanera su discurso, Para él esta es la base de toda educación, aquella que responde a las exigencias del Estado: formar ciudadanos
  • Oct 28, 1466

    Erasmo de Rotterdam

    Erasmo de Rotterdam
    Le daba mucha importancia a la literatura, la educación física, el interés de los alumnos y se oponía a la disciplina severa, la escuela pública ha de estar abierta a todos y evitar las desigualdades sociales. Él decía “Un hombre no instruido en la filosofía u otras disciplinas es un animal inferior incluso a los brutos. Las bestias por lo menos siguen los instintos de la naturaleza, pero el hombre si no está formado es presa de las pasiones inferiores a las bestias.” (Abbagnano N, 1996, 228)
  • Feb 7, 1478

    Tomás Moro

    Tomás Moro
    Su obra más importante y por la que es conocido es Utopía (1516), una sátira política. En ella se puede ver la práctica de una enseñanza universal y la tolerancia religiosa y la tierra pertenece a todos. En las utopías el tipo de educación debe ser social, política y económica para que los ciudadanos puedan participar en la construcción de ese nuevo mundo.
  • 1494

    François Rabelais

    François Rabelais
    Él quería una educación realista, aprendida en la vida y con utilidad para ésta, estaba en contra del ascetismo, de las reglas de pobreza, castidad y obediencia. Según él, la contención era lo malo de la pedagogía de ese tiempo, porque había castigos corporales, reglas escolásticas y culto del pasado. La mejor forma de describir su pensamiento de la educación es con sus propias palabras “Haz lo que quieras”(Abbagnano N, 1996, 231)
  • Feb 28, 1533

    Michel de Montaigne

    Michel de Montaigne
    Sostuvo la necesidad de enseñar a los niños el arte de vivir, además la pedagogía de Montaigne se basa en el desarrollo de las actitudes, es necesario dar ideas, actitudes y habilidades al niño que le sirvan para la vida ya que no estamos edificando un alma ni un cuerpo sino un hombre. Para él, aprender de memoria no es un conocimiento real porque el verdadero aprendizaje requiere que el niño emita un juicio propio. “queremos cabezas bien hechas no bien llenas” (Abbagnano N, 1996, 233)