El concepto de la estética a través del tiempo - Alejandro Chávez

  • 546 BCE

    Periodo preclásico - Grecia

    Para los griegos preclásicos, la belleza era tanto la natural como la de un objeto hecho por el hombre y se asociaba generalmente con otras cualidades: lo bello es lo que gusta, lo que resulta grato a la mirada del espectador. El pensamiento preclásico era mitológico, interpretaban el mundo a través de mitos y fábulas. el primero en plantearse el mundo de forma racional fue Tales de Mileto, que comenzó a fijarse en la naturaleza, deduciendo sus leyes.
  • 499 BCE

    Periodo clásico - Grecia

    Durante el periodo clásico griego, el arte gozó de un gran esplendor, generando un estilo naturalista de interpretar la realidad: los artistas griegos se inspiraban en la naturaleza obedeciendo unas proporciones y unas reglas que permitiesen la captación de esta realidad por parte del espectador. Se perseguía un concepto de belleza basado en la realidad natural pero idealizado con la incorporación de una visión subjetiva reflejando la armonía de cuerpo y alma, equiparando belleza con bondad.
  • 390 BCE

    Platón

    Platón fue el primero que trató sobre conceptos estéticos como centro de muchas de sus reflexiones, sobre todo en temas relativos al arte y la belleza. Para Platón, el arte tiene un sentido general, es la capacidad creadora del ser humano. El concepto de belleza de Platón era muy amplio, abarcando tanto la belleza física como espiritual, la moral y cognoscitiva, la belleza de los cuerpos, de los objetos artísticos, tanto como la de colores, sonidos, leyes, actitudes morales, etc.
  • 367 BCE

    Aristóteles

    El concepto de belleza de Aristóteles se desarrolló con amplitud en la Retórica: es bello lo que, por un lado, nos agrada y, por otro, lo que es valioso por sí mismo. Es decir, la belleza ha de proporcionar placer, y ha de tener un valor intrínseco independientemente de su finalidad. Para Aristóteles, la belleza es buena, aunque no todo lo bueno es bello; por otro lado, la belleza es agradable, aunque no todo placer es bello. A su vez, la belleza ha de ser buena y agradable a un mismo tiempo.
  • 323 BCE

    Escuelas Helenísticas

    El período helenístico supuso una cierta decadencia cultural. La filosofía dejó de estudiar el mundo para centrarse en el ser humano, pasando de una filosofía metafísica a una de contenido netamente moral. A menudo la filosofía se encaminó en esta época a elaborar formas de vida, actitudes existenciales generalmente ligadas a movimientos religiosos, creando corrientes sincréticas en que se sintetizaba la religión con la vida humana. Surgió asimismo el concepto de «gracia».
  • 50 BCE

    Periodo clásico - Roma

    La estética romana era heredera de la griega, las principales aportaciones vinieron del terreno de la literatura: Horacio trató en su "Arte Poética" las reglas de la poesía, que está sometida a un control racional. Lucrecio fue autor del poema "De la naturaleza de las cosas", donde reflejó su visión atea del mundo, influido por el epicureísmo y el atomismo de Demócrito. Plutarco aportó una concepción intelectualista del placer estético, opinando que el arte es conocimiento.
  • 100

    Pseudo-Longino

    Con Pseudo-Longino apareció una nueva categoría estética, lo sublime, que tuvo un gran desarrollo durante el romanticismo. Lo sublime se relaciona con la belleza porque sobrepasa sus límites: la belleza es contención, lo sublime es incontinente; la belleza guarda las formas, lo sublime las pierde; lo bello convence y agrada, lo sublime involucra y sorprende; la belleza está en los objetos a la vista, en lo sublime el objeto desaparece.
  • 244

    Neoplatonismo

    Esta filosofía afirmaba que la belleza es interior, pertenece al alma, y que el arte es una representación exterior del espíritu, por lo que la belleza está en el sujeto. Con Plotino comenzó la «estética de la luz» la cuál afirma que la belleza proviene de una forma y la presencia de una luz incorpórea que ilumina la oscuridad de la materia Así, la belleza no se encuentra en la forma, sino en su «resplandor»: todas las cosas, todas las formas, tienen luz, que es donde radica la belleza.
  • 476

    Edad Media

    La estética medieval era principalmente teológica: la belleza está al servicio de la revelación, sirve para expresar las verdades cristianas. El periodo bajomedieval fue el de la filosofía escolástica, que pretendía el estudio de Dios desde unos postulados más racionalistas –para lo que se basaron principalmente en la filosofía aristotélica–, pero sin renunciar a la fe. Paralelamente surgió la llamada «estética de la luz»: la luz era símbolo de divinidad.
  • 500

    Pseudo-Dionisio

    Para el Pseudo-Dionisio la belleza estaba en los «atributos metafísicos de la trascendencia», es decir, está fuera del objeto. La luz es el bien, es la medida del ser y del tiempo. La invisibilidad de Dios se hace sensible para las cosas terrestres a través de la luz, siendo la luz el principio trascendente de la unidad. En cuanto al arte, para Dionisio su único objetivo es acercarse a la belleza perfecta. La estética dionisiana ejerció una enorme influencia en el concepto cristiano de belleza.
  • 1265

    Santo Tomás de Aquino

    Santo Tomás de Aquino creía belleza y bondad eran lo mismo, aunque la belleza se dirige al intelecto y la bondad a los sentidos. Lo bueno es material, lo bello inmaterial; lo bueno hace desear, lo bello no tiene deseo de posesión. Distinguía en la belleza tres cualidades: integridad, que es la estabilidad estructural del objeto, armonía, es decir, la correcta proporción de las partes de un objeto; y claridad, relacionando la belleza con la luz como símbolo de verdad.
  • 1401

    Edad Moderna - Renacimiento

    La cultura renacentista supuso el retorno al racionalismo, al estudio de la naturaleza y la investigación empírica. La teología pasó a un segundo plano y el objeto de estudio del filósofo volvió a ser el hombre La estética renacentista a veces resultaba algo contradictoria: la belleza oscilaba entre una concepción realista de imitación de la naturaleza y una visión ideal de perfección sobrenatural, siendo el mundo visible el camino para ascender a una dimensión suprasensible.
  • 1509

    La sección áurea

    El Renacimiento puso especial énfasis en la imitación de la naturaleza a través de la perspectiva o de estudios de proporciones, como los realizados por Luca Pacioli sobre la sección áurea, representada como –φ (fi)–, el cual posee diversas propiedades como relación o proporción, que se encuentran tanto en algunas figuras geométricas como en la naturaleza. Asimismo, atribuyó un carácter estético especial a los objetos que siguen la razón áurea, así como les otorgó una importancia mística.
  • La Ilustración

    La Ilustración supuso el paso de una razón normativa a una crítica, donde el conocimiento es un proceso continuo, en transformación. La estética ilustrada se centró en cuestiones fisiológicas, del hombre, haciendo una estética de los sentimientos. Denis Diderot definió la belleza como la percepción de las relaciones, dependiente de la visión personal. Jean-Jacques Rousseau identificó la belleza con el orden natural. El marqués de Sade defendió el individualismo y el sensualismo.
  • Siglo XIX - Romanticismo

    El romanticismo surgió en Alemania a finales del siglo XVIII. Los románticos tenían la idea de un arte que surge espontáneamente del individuo, destacando la figura del «genio» –el arte es la expresión de las emociones del artista–. Exaltaban la naturaleza, el individualismo, el sentimiento, la pasión. También se otorgó un nuevo enfoque a lo oscuro, lo tenebroso, lo irracional, que para los románticos era tan válido como lo racional y luminoso.
  • Esteticismo

    El esteticismo surgió como una tendencia que otorgaba al arte y a la belleza una autonomía propia, llegando incluso a hablarse de una «religión estética». Esta postura pretendía aislar al artista de la sociedad, buscando de forma autónoma su propia inspiración y dejándose llevar únicamente por una búsqueda individual de la belleza. La belleza se alejó de cualquier componente moral, convirtiéndose en el fin último del artista, que llegaba a vivir su propia vida como una obra de arte.
  • Nietzche

    Para Nietzsche, el arte es el gran estimulante de la vida, la obra de arte es lo único que consuela del sufrimiento de vivir. La creación artística es la misma fuerza que el acto sexual, es la misma noción de belleza. Nietzsche opinaba que la belleza no es una sustancia metafísica, no hay una belleza «en sí»; la belleza y la fealdad son relativas, dependen de cada uno. La belleza es la armonización de los deseos, tanto buenos como malos.
  • Semiótica

    La filosofía contemporánea se ha preocupado ampliamente por el signo, el análisis semiótico. Igualmente, el interés de la antropología por la mitología clásica y primitiva, así como las grandes «formas simbólicas» presentes en la cultura: el lenguaje, el mito, el arte, la religión y la ciencia. Así, el hombre se halla determinado por estas formas, que son una representación de sí mismo, por lo que cada una de ellas supone una distinta manera de concebir el mundo.