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Inventor del teléfono
Antonio Meucci construyó un teléfono para conectar su oficina con su dormitorio, ubicado en el segundo piso, debido al reumatismo de su esposa. -
Robo del invento
Ya que Antonio carecía de los recursos para patentar su invento, lo llevó a una empresa en la que se apoderaron del teléfono y los materiales cayeron en manos de Alexander Graham Bell, que se sirvió de ellos para desarrollar su teléfono y lo presentó como propio. -
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El problema fue el precario dominio del idioma de Meucci
Muchos historiadores concuerdan en que el precario dominio del idioma por parte de Meucci fue parte del problema, pero eso no le impidió dejar registradas otras catorce patentes.
Aunque se presentó una demanda, nunca se obtuvo el debido seguimiento. -
El invento de Meuci publicado en periódico de New York
Fue publicado en un periódico para la comunidad italiana que circulaba en New York y para 1862 ya tenia mas de treinta modelos de su “teletrofono” y había instalado unos en su casa, para facilitar la comunicación con su esposa que padecía de artritis y difícilmente podía desplazarse. -
Regresa por los materiales Meucci y se los niegan.
Meucci, en vista de la falta de interés regresó a las oficinas reclamando el material dejado y curiosamente le contestaron que se había perdido -
Patentado por:
Tras haber descubierto que para transmitir voz humana sólo se podía utilizar una corriente continua, el inventor estadounidense Alexander Graham Bell construyó y patentó el primer teléfono capaz de transmitir y recibir voz humana con toda su calidad y timbre. -
Muere sin resolver el caso...
Finalmente, después de vivir humildemente Antonio Meucci murió en octubre de 1889 y poco después el caso se cerró. El campo estaba libre para Bell y su descendencia. Había todo un planeta por cablear y todo un siglo para hacer dinero -
El Congreso de los Estados Unidos aprobó la resolución 269
Por la que reconoció que el inventor del teléfono había sido Antonio Meucci y no Alexander Graham Bell. En la resolución, aprobada por unanimidad, los representantes estadounidenses estiman que "la vida y obra de Antonio Meucci debe ser reconocida legalmente, y que su trabajo en la invención del teléfono debe ser admitida".
