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Descubrimiento de las bacterias y de los protozoos
Anton van Leeuwenhoek fue la primera persona que observó bacterias por primera vez en 1676 mediante un microscopio de lente simple. En primera instancia fueron denominadas animálculos hasta que en unos 200 años más tarde las conocerían mediante el término utilizado actualmente “bacterias” y “protozoos”. -
Creación del primer revólver
En 1776, Jeremiah Sisson fue capaz de construir el primer revólver para microscopios, que permitiría cambiar de objetivo de una forma rápida y sencilla. -
Descubrimiento de las neuronas
Santiago Ramón y Cajal recibió el Premio Nobel de Medicina en 1906 al descubrir mediante una técnica de tintado que el sistema nervioso está compuesto por las neuronas. -
Invención del microscopio electrónico de transmisión (MET)
Gracias a la invención de una la primera lente electromagnética en 1926, años más tarde (aproximadamente en el 1930), Erns Ruska fue capaz de inventar el microscopio electrónico; un instrumento bastante más potente que un simple microscopio óptico. -
Descubrimiento del virus del papiloma
En 1983, el científico y médico alemán Harald zur Hausen fue capaz de descubrir el virus del papiloma humano al lograr aislar dos cepas del virus responsables del 70% de los cánceres en el cuello del útero bajo un microscopio. -
Invención del microscopio a escala nanométrica
En el año 2014, los científicos Eric Betzig, William E. Moerner y Stefan W. Hell fueron galardonados con el Premio Nobel de Química "por el desarrollo de la microscopía de alta resolución". Concretamente al ser capaces de inventar un microscopio que permite observar el interior de las célula y ciertas proteínas y moléculas de un tamaño minúsculo. -
Capacidad de observar y grabar el movimiento de células en el interior de un organismo
Un grupo de investigadores del Howard Hughes Medical Institute fueron capaces de observar y grabar el movimiento de las células en su estado nativo, es decir, en el interior de un organismo. Esto fue posible gracias a un tipo de microscopio que permite observar y grabar en 3D las células de forma relativamente nítida