-
Primera Edición
En 1996, la primera edición de COBIT fue publicada. Esta incluía la colección y análisis de fuentes internacionales reconocidas y fue realizada por equipos en Europa, Estados Unidos y Australia. -
Segunda Edición
En 1998, fue publicada la segunda edición; su cambio principal fue la adición de las guías de gestión. -
Marco de Referencia COBIT
Fue posterior al 2003 que el marco de referencia de COBIT fue revisado y mejorado para soportar el incremento del control gerencial, introducir el manejo del desempeño y mayor desarrollo del Gobierno de TI. -
Versión 4
En diciembre de 2005, la cuarta edición fue publicada y en Mayo de 2007, se liberó la versión 4.1. -
COBIT 5
Cobit 5 está basado en cinco principios:
Satisfacer las necesidades de los interesados.
Cubrir la empresa de extremo a extremo.
Aplicar un solo marco integrado.
Habilitar un enfoque holístico.
Separar gobierno de administración. -
COBIT 5
La versión número 5 de COBIT fue liberada en el año 2012. En esta edición se consolida e integran los marcos de referencia de COBIT 4.1, Val IT 2.0 y Risk IT. Este nuevo marco de referencia viene integrado principalmente del Modelo de Negocios para la Seguridad de la Información (BMIS, Business Model for Information Security) y el Marco de Referencia para el Aseguramiento de la Tecnología de la Información (ITAF, Information Technology Assurance Framework). -
Se actualiza COBIT 5
Se actualiza COBIT 5, y se llamará COBIT 2019. -
COBIT 2019
En esta edición actualizada, COBIT equipa a las organizaciones para prosperar, evolucionar y aprovechar mejor las oportunidades que ofrece la tecnología. -
Alinea la TI con los objetivos de la empresa
COBIT 2019 ayuda a las compañías a establecer objetivos de TI tangibles y que estén alineados a las estrategias comerciales del negocio. -
Mejora la gestión del desempeño
COBIT 2019 Performance Management (CPM) permite a las organizaciones medir el desempeño de los distintos segmentos del framework y puntuarlos. En otras palabras, brinda la oportunidad de evaluar el rendimiento individual de sus funciones por separado, y -a partir de ello- identificar qué está funcionando. De esta forma, puede suprimir procesos innecesarios y enfocarse en aquellos que generen valor para el negocio.