Herrmann

Bernard Herrmann

  • nacimiento

    nacimiento
    (Nueva York; 29 de junio de 1911 – Los Ángeles; 24 de diciembre de 1975) fue un compositor estadounidense especializado en el género cinematográfico. Galardonado con un premio de la Academia a la mejor música de película dramática por su trabajo en El hombre que vendió su alma (The Devil and Daniel Webster, 1941),
  • Primeros Años

    Primeros Años
    Bernard Herrmann nació en la gran metrópoli de Nueva York. Su padre, Abraham, era un inmigrante judío que había llegado desde Rusia para hacer fortuna en Estados Unidos, y que quiso inculcar a sus dos hijos, Benny y Louis, su gran afición por la música, enseñándoles a disfrutar con su gran colección de discos de ópera y conciertos sinfónicos, y regalándoles a cada uno de ellos un instrumento musical.
  • Debut

    Debut
    En 1933 se vinculó con la Columbia Broadcasting System, donde musicalizó documentales y programas radiofónicos. De esta forma conoció a Orson Welles, quien estaba buscando a alguien que le compusiera temas para programas de radio. Uno de estos, La guerra de los mundos, sobre la novela homónima de H. G. Wells, que cuenta una invasión extraterrestre, marcó un hito en la historia de la radiodifusión, causando el mayor impacto de la historia de la radio.
  • Otros trabajos musicales

    Entre sus piezas sinfónicas están: Aubade (1933), que él mismo reconvertiría en la elegía Silent Noon (1975); Sinfonietta for Strings (1935); Currier e Ives Suite (1935), homenaje en cinco movimientos a uno de sus iconos, el músico Charles Ives; la cantata Moby Dick (1938); su sinfonía de 1941 The Fantasticks (1942); su ópera Whuthering Heights (1943-1951); y sus ballets Americana (1932), The Skating Rink (1934) y Body Beautiful (1935).
  • colaboración con Hitchcock

     colaboración con Hitchcock
    Durante los años cincuenta, su carácter fue transformándolo en un individuo antisocial, agresivo y solitario, descontento con su profesión y convencido de que todo a su alrededor era negativo. Su prepotencia musical la consolidó con un estilo personal, acorde con su melancólico estado de ánimo, en las cuerdas obsesivamente románticas de Jane Eyre, El fantasma y la señora Muir y Las nieves del Kilimanjaro.
  • De Hollywood a Europa: ocho años de exilio voluntario

    De Hollywood a Europa: ocho años de exilio voluntario
    Poco tiempo después, Cortina rasgada marcaría el desencuentro de estos dos grandes creadores, al ser rechazada la partitura compuesta por Herrmann para sustituirla por una mucho más comercial y también más anodina, algo que resultó mortal en la frágil mentalidad de Hermann, que dimitió de su cargo en la Academia y fue rechazado en el declive de los grandes estudios. Era un aviso de la ola de banalidad que amenazaba en la industria cinematográfica
  • Últimos años: regreso a Estados Unidos y Taxi Driv

    Regresó a su país en 1973 reclamado por el director Brian de Palma, un fanático del cine de Hitchcock, quien consiguió recuperar el talante del compositor en las películas Hermanas y Fascinación. En 1975, después de leer el guion de Taxi Driver, Martin Scorsese pensó en Herrmann como única opción posible para hacer la música de la película. El filme iba a ser una especie de «gótico neoyorquino» y el cineasta sabía sólo Herrmann
  • fallecimiento

    North Hollywood, California, Estados Unidos
  • el cabo del miedo