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De generación en generación
Tras ciertos años en el joyero, por fin veo la luz del sol. Soy heredera de una generación a otra. En estos momentos me hallo en las manos de mi nueva dueña, pero he de confesar que estoy algo mojada. Lo cierto es que mi nueva dueña se ha emocionado al verme. -
¡Qué vivan los novios!
Dicen que no se puede ser feliz todos los días, pero he de confesar que hoy me siento más feliz que nunca. Me acuerdo de cuando te preguntabas si algún día llegaría este día y "voilà". Lo cierto es que hoy me siento valorada por ti, aunque nunca te he podido decir nada, siempre he querido formar parte de tal día como hoy. ¡Soy feliz!. Me encuentro en uno de los días más bonitos e inolvidables de la familia a la que pertenezco. -
Period: to
En el joyero de mi dueña
Cómo sigo yo ahora sin ti, y es que sigo teniendo ganas de salir, de ver la luz del sol, de disfrutar y ser participe de todos tus días. -
Un día especial
Hoy me encuentro en el segundo piso del hospital. Mi dueña huele a perfume, pero a su vez a un recién nacido. He de confesar que me ha gustado estar presente en el nacimiento de la hija de mi dueña. En definitiva, hoy he sido feliz mientras tú sonreías. -
De celebración
Después de varios años en el joyero mi dueña ha decidido hacerme participe de la comunión de su hija en la Iglesía de Santa María.