SOFÁ ESTAMPADO

  • Origen

    Origen
    Pertenezco a Eduardo y Emili. Eduardo trabajaba en Aceros de Llodio, una fábrica en la localidad de Llodio, y les cedieron un piso en una calle céntrica del pueblo. Con la crisis siderúrgica, la fábrica cerró y se mudaron a otra casa en otro barrio. Ellos todavía no me conocían.
  • Mis inicios

    Mis inicios
    Cuando Eduardo y Emili se mudaron de su primera casa, yo no existía. Me compraron para su nueva casa en el barrio de Ugarte. Tuvieron que comprar muchos muebles porque la casa nueva no los tenía, así que yo fui uno de ellos. En aquel entonces yo no era estampado, era de color gris-azulado. Eduardo y Emili tienen 6 hijos, pero antes de 1992, muchos ya no vivían con ellos, así que no necesitaban un sofá muy grande.
  • Sofá original

    Sofá original
    En mis orígenes, cuando Eduardo y Emili me compraron para su casa de Ugarte, yo era de color gris-azulado. Luego me tapizaron, y me pusieron el estampado de flores que tengo hoy en día.
  • Tapizado estampado

    Tapizado estampado
    La fábrica decidió poner en venta los pisos anteriores y Eduardo y Emili se mudaron de nuevo al 1º de la calle Baias. Con el paso del tiempo, el tapizado que tenía antes se me fue rompiendo, así que Emili decidió llevarme a un tapicero, aproximadamente en el 2002, para que me pusieran una nueva tela. Eligieron el estampado de flores que tengo ahora.
  • Period: to

    Inserción tabla madera

    En algún momento entre 2002 y 2010, Eduardo, que sufría de prostata y que disfrutaba experimentando, decidió insertar en mi interior, en el lado derecho en el que él se sentaba, una tabla de madera para mitigar y prevenir los efectos de la prostatitis. Sus nietos cada vez que se sentaban, se levantaban doloridos por la rigidez del asiento.
  • Nietos y Vida en casa

    Nietos y Vida en casa
    Desde el 2002 hasta el 2005, los nietos de Eduardo, Jonan y Amaia, vivieron con nosotros en casa. Eran pequeños y aunque no se acuerden del todo, venían a mí a sentarse, ver la tele con su aitite, hacerle compañía o dormir. Los sábados por la tarde toda la familia se reunía en nuestra casa, y se sentaban en mí a ver los partidos, charlar, o jugar. Me encantaba sentir la felicidad, alegría y calidez familiar en el ambiente. Ya de más mayor, Amaia se sentaba en mí para acompañar a su aitite.
  • Sofá azul

    Sofá azul
    Alrededor del 2017, Eduardo decidió que estaría más cómodo en un sofá reclinable individual, para poder echar la siesta, así que compró un sofá azul eléctrico en Eroski. La verdad que no pega mucho con la estética del salón, pero si a Edu le hace feliz, a mí también. Aunque ya no me usaba tanto, seguíamos estando juntos en el salón, y disfrutábamos el uno del otro como siempre. Su nieta Amaia seguía sentándose en mí, y también su perrito Terry.
  • Actualidad

    Actualidad
    Desde el 2 de septiembre a las 23:50 de la noche, tras un tedioso y doloroso mes fuera de casa en el Hospital de Galdakano, Eduardo ya no se sienta ni viene a verme. Ahora su nieta Amaia me hace compañía en ocasiones o su perrito Terry duerme en mí, pero nadie entra mucho a donde estoy, para mantener intacta la esencia de Eduardo. Ahora me siento solo, y vacío, desde que ya nadie ocupa esta estancia.