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Un parto lento y engorroso
Los partos de los libros son siempre engorrosos en concreto el señor obsesivo y buscavidas, Doctor Gallardo de turno que me escribió tardó largos años en darme a la luz. Salí completo al fin éste año. Con la tinta aún secándose y las páginas blancas como la nieve -
Primer hermano (segundo manual)
Hasta ahora tenía la ilusión de ser hijo único. Mi dueño me miraba e iba sacando soluciones para los problemas de sus pacientes (algunas bastante originales). Yo sé hacer de todo: Desde cataplasmas pasando por soluciones químicas hasta chocolate caliente. Pero, como dice mi dueño "la ciencia siempre avanza" y hoy me ha nacido un hermano que se ha venido a vivir a la estantería. -
Algo hacemos
Parece que en algo ayudamos a la gente, no sé si curamos a alguien o no, pero después de ver a mi dueño la gente que viene (demacrada, desesperada muchas veces) se va con una sombra de esperanza. Hoy hemos ayudado a una familia que tenía a varios hijos enfermos. Mi dueño no les ha cobrado nada. Hay cosas más importantes dice... -
Somos tres..
Hoy se ha unido otro, ahora somos cuatro entes intentando ayudar a la gente... Pero parece que el tiempo afecta a nuestro dueño más que a nosotros... -
Y mucho después
Seguimos estando (no sé si siendo). Ahora ya nadie nos utiliza. De vez en cuando alguien nos ojea y se ríe con los remedios ¡Solo queríamos ayudar! Nuestro dueño ya pasó hace mucho, pero sangre sigue viva como mi tinta. Ahora solo divertimos a la gente de vez en cuando. Al fin al cabo, la risa es una buena medicina.
