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1550
Barroco - Lope de Vega
A una dama que salió revuelta una mañana Hermoso desaliño, en quien se fía
cuanto después abrasa y enamora,
cual suele amanecer turbada aurora,
para matar de sol al mediodía. Solimán natural, que desconfía
el resplandor con que los cielos dora;
dajad la arquilla, no os toquéis, señora,
tóquese la vejez de vuestra tía. Mejor luce el jazmín, mejor la rosa
por el revuelto pelo en la nevada
columna de marfil, garganta hermosa. -
1551
Barroco - Miguel de Cervantes Saavedra
Galatea Tanto cuanto el amor convida y llama
al alma con sus gustos de apariencia,
tanto más huye su mortal dolencia
quien sabe el nombre que le da la fama. Y el pecho opuesto a su amorosa llama,
armado de una honesta resistencia,
poco puede empecerle su inclemencia,
poco su fuego y su rigor le inflama. Segura está, quien nunca fue querida
ni supo querer bien, de aquella lengua
que en su deshonra se adelgaza y lima; -
Romanticismo - Edgar Allan Poe
A....(Las enramadas donde veo) Las enramadas donde veo
en sueños, las más variadas
aves cantoras, son labios y son
tus musicales palabras susurradas. Tus ojos, entronizados en el cielo,
caen al fin desesperadamente
¡oh Dios!, en mi funérea mente
como luz de estrellas sobre un velo. Oh, tu corazón… suspiro al despertar
y duermo para soñar hasta que raya el día
en la verdad que el oro jamás podrá comprar
y en las bagatelas que sí podría. -
Romanticismo - Víctor Hugo
Te deseo Te deseo primero que ames,
y que amando, también seas amado.
Y que, de no ser asi, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que si es,
sepas ser sin desesperar. Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar. -
Modernismo - Manuel Machado
Ocaso Era un suspiro lánguido y sonoro
la voz del mar aquella tarde… El día,
no queriendo morir, con garras de oro
de los acantilados se prendía. Pero su seno el mar alzó potente,
y el sol, al fin, como en soberbio lecho,
hundió en las olas la dorada frente,
en una brasa cárdena deshecho. Para mi pobre cuerpo dolorido,
para mi triste alma lacerada,
para mi yerto corazón herido, para mi amarga vida fatigada…
¡el mar amado, el mar apetecido,
el mar, el mar, y no pensar nada…! -
Modernismo - Rubén Darío
De otoño Yo sé que hay quienes dicen: ¿por qué no canta ahora
con aquella locura armoniosa de antaño?
Ésos no ven la obra profunda de la hora,
la labor del minuto y el prodigio del año. Yo, pobre árbol, produje, al amor de la brisa,
cuando empecé a crecer, un vago y dulce son.
Pasó ya el tiempo de la juvenil sonrisa:
¡dejad al huracán mover mi corazón! -
Primera mitad del siglo XX - Miguél Hernández
No quiso ser No conoció el encuentro
del hombre y la mujer.
El amoroso vello
no pudo florecer. Detuvo sus sentidos
negándose a saber
y descendieron diáfanos
ante el amanecer. Vio turbio su mañana
y se quedó en su ayer. No quiso ser. -
Primera mitad del siglo XX - Pedro Salinas
Fe mía No me fío de la rosa
de papel,
tantas veces que la hice
yo con mis manos.
Ni me fío de la otra
rosa verdadera,
hija del sol y sazón,
la prometida del viento.
De ti que nunca te hice,
de ti que nunca te hicieron,
de ti me fío, redondo
seguro azar. -
Segunda mitad del siglo XX - Pablo Neruda
Amor Mujer, yo hubiera sido tu hijo, por beberte
la leche de los senos como de un manantial,
por mirarte y sentirte a mi lado y tenerte
en la risa de oro y la voz de cristal.
Por sentirte en mis venas como Dios en los ríos
y adorarte en los tristes huesos de polvo y cal,
porque tu ser pasara sin pena al lado mío
y saliera en la estrofa -limpio de todo mal-. Cómo sabría amarte, mujer, cómo sabría
amarte, amarte como nadie supo jamás!
Morir y todavía
amarte más.
Y todavía
amarte más
y más. -
Segunda mitad del siglo XX - Gabriel Celaya
Despedida Quizás, cuando me muera,
dirán: Era un poeta.
Y el mundo, siempre bello, brillará sin conciencia. Quizás tú no recuerdes
quién fui, mas en ti suenen
los anónimos versos que un día puse en ciernes. Quizás no quede nada
de mí, ni una palabra,
ni una de estas palabras que hoy sueño en el mañana. Pero visto o no visto,
pero dicho o no dicho,
yo estaré en vuestra sombra, ¡oh hermosamente vivos! Yo seguiré siguiendo,
yo seguiré muriendo,
seré, no sé bien cómo, parte del gran concierto. -
Principios del siglo XXI - Miriam Reyes
Amar la nieve no me ayuda a resistir el frío Desmonté las calles una ciudad tras otra
para alimentar el fuego
y me puse a vivir
entre las hogueras. -
Principios del siglo XXI - Erika Martínez
ABOLIRSE Se podría afirmar: yo soy mi cuerpo. Sin embargo, si perdiera la pierna derecha en una batalla o huyendo de la batalla o más bien en un estúpido accidente doméstico, seguiría siendo yo. También seguiría siéndolo si perdiera las dos piernas, o incluso todos mis miembros ¿Cuánto cuerpo tendría que perder para dejar de ser yo? Quizás una mínima parte de mí representaría al resto por sinécdoque. O quizás mis restos me convertirían en otra Cortarte las uñas te modifica existencialmente -
Época actual. - Loreto Sesma
IRA Vengo de una rutina de silencios,
de miedos tintineantes,
de complejos que acabaron convirtiendo el oro en barro. Me dijeron que el futuro se labraba,
y yo por mucho que miro
sólo encuentro temor
y ningún motivo
para seguir contando mis pasos. ¿Por qué el camino
para que cuente como vida
se ha de hacer llorando? -
Época actual - César Bringas
Se trata de seguir adelante. Con fuerza. Se trata de reír cuando nadie más ríe porque es la broma pesada hacia ti mismo. Se trata del mar. Es extraña esta sensación de calma. Le temo a la tormenta. Durante la semana que no estuve en la ciudad las aguas se llevaron a la alcantarilla a un niño. Nunca me dijo si le gustó el poema, pero terminó llorando por él. Es extraña la calma, pero más extraña la tormenta. -
Cambio de la poesía - Yo
La poesía a lo largo de los años ha ido cambiando, yo pienso que antes era como que había un tema y ese tema duraba mucho tiempo, ahora los temas de los que los poemas tratan ya son mas variados, por todo lo que pasa en el mundo se pueden hacer poemas, antes solo se centraban en un tema en especifico y duraba muchos años, también las palabras que se ocupaban antes eran mas correctas por así decirlo y puede que no les entendamos, los de ahora creo que son las fáciles las palabras que se emplean.