Núcleos cristianos

  • 910 BCE

    Alfonso III traslada la capital a León, marcando el inicio del Reino de León.

    En el reinado de Alfonso III de Asturias (866-910), se trasladó la capital del reino a León, marcando el inicio del Reino de León. Este cambio reflejó la expansión territorial y la creciente importancia de León como centro político y cultural en la península ibérica. Alfonso III también contribuyó al fortalecimiento del reino y su consolidación como una entidad clave en la Reconquista.
  • 850 BCE

    Reinado de Ramiro I, otro monarca importante en la resistencia cristiana en el núcleo asturiano.

    Durante el reinado de Ramiro I de Asturias (842-850), el reino cristiano continuó consolidándose como una entidad resistente frente a la presión musulmana. Ramiro I fortaleció las defensas y lideró expediciones exitosas contra las fuerzas islámicas. Su reinado contribuyó al desarrollo de la resistencia cristiana en el núcleo asturiano, marcando una fase crucial en la Reconquista de la península ibérica.
  • 814 BCE

    Reinado de Alfonso II de Asturias, quien traslada la capital a Oviedo y contribuye a consolidar el Reino de Asturias.

    Durante el reinado de Alfonso II de Asturias (791-842), se llevó a cabo la traslación de la capital del Reino de Asturias de Cangas de Onís a Oviedo. Esta medida fortaleció la posición defensiva contra las incursiones musulmanas y contribuyó a consolidar el reino. Alfonso II también impulsó la construcción de la iglesia de San Salvador en Oviedo, que simbolizó el renacimiento cultural y artístico en el naciente reino cristiano.
  • 718 BCE

    Pelayo lidera la resistencia cristiana en la Batalla de Covadonga, marcando el inicio del Reino de Asturias.

    En la Batalla de Covadonga en el año 722, Pelayo lideró la resistencia cristiana contra las fuerzas musulmanas en la península ibérica. La victoria de los cristianos en este enfrentamiento es considerada el inicio del Reino de Asturias, marcando el comienzo de la Reconquista en la región. Este evento histórico simboliza la primera resistencia exitosa frente a la expansión musulmana en la península ibérica.
  • 1037

    Fernando I unifica los reinos de León y Castilla, creando el Reino de León y Castilla.

    En el siglo XI, Fernando I de León (1037-1065) logró unificar los reinos de León y Castilla, creando el Reino de León y Castilla. Esta unificación representó un paso importante en la consolidación de un poder cristiano fuerte en la península ibérica, marcando la continuación de la Reconquista. El nuevo reino sentó las bases para la futura formación de la Corona de Castilla.
  • 1085

    Alfonso VI de Castilla toma Toledo a los musulmanes, marcando un hito importante en la Reconquista.

    En 1085, Alfonso VI de Castilla tomó la ciudad de Toledo a los musulmanes, marcando un hito crucial en la Reconquista. Esta victoria no solo consolidó el control cristiano sobre una ciudad estratégica, sino que también simbolizó un avance significativo en la recuperación de territorios en la península ibérica. Toledo se convirtió en un centro cultural y religioso clave durante el periodo de convivencia de las tres culturas.
  • 1094

    Rodrigo Díaz de Vivar, conocido como El Cid, conquista Valencia para el Reino de León.

    En 1094, Rodrigo Díaz de Vivar, más conocido como El Cid, conquistó Valencia para el Reino de León. Su gesta militar independiente se destacó por la toma de esta importante ciudad a los musulmanes, aunque más tarde se convirtió en un señor independiente. El Cid desempeñó un papel crucial en la Reconquista, simbolizando la figura del héroe medieval en la península ibérica.
  • 1147

    Alfonso VII de León y Castilla se autoproclama Emperador de Todas las Españas.

    Alfonso VII de León y Castilla se autoproclamó "Emperador de Todas las Españas". Esta declaración reflejó su ambición de unificar los diversos reinos cristianos en la península ibérica bajo su autoridad, aunque el título de emperador tuvo más un significado simbólico que un poder político real. La iniciativa de Alfonso VII buscaba consolidar su posición en un período clave de la Reconquista.
  • 1157

    Tratado de Sahagún, que divide el Reino de León y Castilla entre los hijos de Alfonso VII

    El Tratado de Sahagún, firmado en 1158, dividió el Reino de León y Castilla entre los hijos de Alfonso VII, Fernando II y Alfonso VIII. Este acuerdo buscaba evitar conflictos sucesorios y marcó el inicio de la separación efectiva de los reinos, con León gobernado por Fernando y Castilla por Alfonso. Este evento tuvo implicaciones significativas en la evolución política de la península ibérica.
  • 1212

    Batalla de Las Navas de Tolosa, importante victoria cristiana que debilita a los almohades en la península.

    La Batalla de Las Navas de Tolosa, librada en 1212, fue una decisiva victoria cristiana liderada por Alfonso VIII de Castilla. Este enfrentamiento debilitó significativamente a los almohades, una dinastía musulmana, en la península ibérica, marcando un hito en la Reconquista. La derrota almohade abrió el camino para el avance cristiano en la región.
  • 1230

    Fernando III de Castilla unifica definitivamente León y Castilla, consolidando el Reino de Castilla.

    En el siglo XIII, Fernando III de Castilla, conocido como Fernando el Santo, logró la unificación definitiva de León y Castilla, consolidando el Reino de Castilla. Su habilidad política y militar le permitió extender su autoridad sobre ambas regiones, marcando un paso crucial hacia la formación de la Corona de Castilla. Este proceso contribuyó a la continuidad del avance cristiano durante la Reconquista.
  • 1238

    Jaume I de Aragón conquista Valencia, marcando la expansión de la Corona de Aragón.

    En 1238, Jaume I de Aragón, también conocido como Jaime I el Conquistador, conquistó la ciudad de Valencia, consolidando así la expansión de la Corona de Aragón. Su victoria representó un logro significativo durante la Reconquista, integrando Valencia a los territorios de la corona y estableciendo una diversidad cultural y religiosa en la región. La conquista de Valencia contribuyó al crecimiento y la influencia de la Corona de Aragón en la península ibérica.
  • 1248

    Fernando III de Castilla conquista Sevilla.

    En 1248, Fernando III de Castilla conquistó la ciudad de Sevilla durante la Reconquista. Esta victoria significativa marcó la culminación del proceso de incorporación de la Andalucía musulmana al Reino de Castilla y consolidó la posición de Fernando III como uno de los monarcas más destacados de la época. La toma de Sevilla también contribuyó al florecimiento cultural y comercial de la región.
  • 1292

    Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón completan la Reconquista con la toma de Granada.

    En 1492, Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón completaron la Reconquista con la toma de Granada, el último reducto musulmán en la península ibérica. Este evento histórico culminó con la unificación de España bajo los Reyes Católicos, marcando el final de la presencia islámica en la región y el comienzo de una nueva etapa en la historia de España. La misma año, también se firmaron los Edictos de Expulsión para los judíos, dando lugar a una España más homogénea en términos religiosos.