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LA PRIMERA GUERRA CARLISTA
LAS GUERRAS CARLISTAS son guerras civiles que se producen en el tránsito entre el Antiguo Régimen y el Liberalismo en España, situándose la más virulenta de ellas justo en el momento en que se produce esta transición, es decir, en el periodo de las regencias debido a la minoría de edad de Isabel II (1833-43) -
Inicio
Se inició con el levantamiento de partidas carlistas en el País Vasco y Navarra, y pronto controlaron el medio rural, aunque ciudades como Bilbao, San Sebastián, Vitoria y Pamplona permanecerán fieles a Isabel II y al liberalismo. La vacilación del gobierno permitió a los carlistas, con gran apoyo popular -
Ganadores
El general Espartero venció a las tropas carlistas en Luchana en 1836 y el último periodo del conflicto estuvo marcado por la iniciativa del ejército liberal al mando de Espartero y la división de los carlistas entre los partidarios de llegar a un acuerdo con los liberales. -
Convenio de Bergara
Mediante el Convenio de Vergara de 1839, los generales Maroto y Espartero firmaron la paz, y acordaron mantener los fueros en las provincias vascas y Navarra e integrar a la oficialidad carlista en el ejército liberal. -
SEGUNDA GUERRA CARLISTA
Los carlistas seguían siendo la mayor fuerza opositora al liberalismo. Se centró en la zona de los Pirineos, en Cataluña, «guerra dels matiners», y fue fácilmente sofocada. Su origen, al menos teóricamente, se debió al fracasar los intentos de casar a Isabel II con el pretendiente carlista, Carlos Luis de Borbón, que había sido pretendido por distintos sectores moderados de Isabel. -
Inicio
Comienza con la inestabilidad política del estado y la falta de solución a los numerosos conflictos políticos, económicos y sociales. Las transformaciones de los últimos años la distinguirán de la primera, es decir, la movilidad de las tropas favorecidas por las nuevas vías de comunicación, la eficacia de las armas, etc. -
Cortes
En las cortes de 1869, el carlismo obtuvo una veintena de diputados y en las posteriores legislativas sus resultados fueron aun mejores. -
TERCERA GUERRA CARLISTA
La tercera guerra carlista se inició una vez destronada Isabel II, ya en el Sexenio Revolucionario. Beneficiados por el clima de libertad que introdujo la revolución de «La Gloriosa», el carlismo había revivido como fuerza política. Pero la llegada de Amadeo de Saboya provocó la insurrección armada de una parte de los carlistas, mientras que otra facción constituyó una pequeña fuerza política opuesta a la nueva monarquía y con posiciones enormemente conservadoras. -
Fin
El 28 de Febrero de 1876 finalizan las guerras carlistas. Tras ellas el carlismo moderado se separaría para siempre de la corriente levantisca para formar una opción política alternativa al liberalismo.