F

EL RELOJ

  • Nacimiento

    Nacimiento
    Nací en un humilde taller de relojes. Un señor con gafas y bigote me diseñó dos meses antes, y una soleada tarde de invierno decidió crearme.
  • Mudanza

    El día que vinieron a recogerme tuve que abandonar mi hogar: el escaparate de una pequeña tienda situada en la calle 31 de agosto, en San Sebastián. Por una parte, me sentí muy tirste, pues tuve que decirle adiós a la que fue mi mejor amiga durante dos años: una tacita de té. Pero, por otra, supe que iban a llevarme a un lugar mejor.
  • Traslado

    Tras pasar cuatro años en la cocina de una casita ubicada en Urnieta, un pueblito de Guipúzcoa, mis dueños decidieron cambiarme de lugar. Me trasladaron de la estantería de cristal de la cocina al mueble de madera del salón.
  • Avería

    Ese año sufrí mi primera y única avería. Una tranquila tarde comencé a sentirme mal. Mis agujas comenzaron a fallar, se paraban y se volvían a poner en marcha. Cuatro días más tarde, dejaron definitivamente de funcionar.