-
1903 BCE
Siglo XX
Xavier Villaurrutia
"Inventar la verdad" -
1903 BCE
Verso
Pongo el oído atento al pecho,
como, en la orilla, el caracol al mar.
Oigo mi corazón latir sangrando
y siempre y nunca igual.
Sé por qué late así, pero no puedo
decir por qué será. Si empezara a decirlo con fantasmas
de palabras y engaños al azar,
llegaría, temblando de sorpresa,
a inventar la verdad:
¡Cuando fingí quererte, no sabía
que te quería ya! -
1849 BCE
Siglo XIX
Manuel Acuña
"Pobre flor" -
1849 BCE
Verso
«¿Por qué te miro así tan abatida,
pobre flor?
¿En dónde están las galas de tu vida
y el color?
»Dime, ¿por qué tan triste te consumes,
dulce bien?»
«¿Quién?, ¡el delirio devorante y loco
de un amor,
que me fue consumiendo poco a poco
de dolor!
Porque amando con toda la ternura
de la fe,
a mí no quiso amarme la criatura
que yo amé.
»Y por eso sin galas me marchito
triste aquí,
siempre llorando en mi dolor maldito,
¡Siempre así!»
¡Habló la flor!...
Yo gemí... era igual a la memoria
de mi amor. -
1768 BCE
Siglo XVIII
Manuel Martínez de Navarrete
"A unos ojos" -
1768 BCE
Verso
Cuando mis ojos miraron
de tu cielo los dos soles,
vieron tales arreboles
que sin vista se quedaron.
Mas por ciegos no dejaron
de seguir por sus destellos,
por lo que duélete de ellos,
que aunque te causen enojos,
son girasoles mis ojos
de tus ojos soles bellos. -
1695 BCE
Siglo XVII
Sor Juana Inés de la Cruz
"Redondillas" -
1695 BCE
Verso
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis: si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si las incitáis al mal? Cambatís su resistencia
y luego, con gravedad,
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia. -
1577 BCE
Siglo XVI
Francisco de Terrazas
"Soñé que de una peña me arrojaba..." -
1577 BCE
Verso
Soñé que de una peña me arrojaba
quien mi querer sujeto a sí tenía,
y casi ya en la boca me cogía
una fiera que abajo me esperaba. Yo, con temor, buscando procuraba
de dónde con las manos me tendría,
y el filo de una espada la una asía
y en una yerbezuela la otra hincaba. La yerba a más andar la iba arrancando,
la espada a mí la mano deshaciendo,
yo más sus vivos filos apretando... ¡Oh, mísero de mí, qué mal me entiendo,
pues huelgo verme estar despedazando
de miedo de acabar mi mal muriendo! -
1472 BCE
Época prehispánica
Príncipe poeta Nezahualcóyotl
"Yo lo pregunto" -
1472 BCE
Verso
Yo Nezahualcóyotl lo pregunto:
¿Acaso de veras se vive con raíz en la tierra?
Nada es para siempre en la tierra:
Sólo un poco aquí.
Aunque sea de jade se quiebra,
Aunque sea de oro se rompe,
Aunque sea plumaje de quetzal se desgarra.
No para siempre en la tierra:
Sólo un poco aquí.