ACV Botella de Pet Jared AE44023

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    Extracción de materia prima

    Extracción de materia prima
    La producción de una botella de plástico comienza con la extracción del petróleo y el gas natural, que son las materias primas básicas para los plásticos. Estos materiales se extraen de pozos en el suelo y en el mar, y luego se transportan a refinerías donde son procesados para crear compuestos como el etileno, el cual es un componente principal para producir el PET (tereftalato de polietileno).
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    Producción de la botella

    Producción de la botella
    En esta etapa, el etileno se somete a un proceso de polimerización para crear el PET. Este material es transformado en pequeñas bolitas o "pellets" de plástico, que son transportados a fábricas donde se moldean para formar las botellas. Este proceso de moldeado se realiza mediante soplado, donde los pellets se calientan hasta volverse maleables y se introducen en moldes con la forma de la botella.
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    Distribución y transporte

    Distribución y transporte
    Las botellas de plástico vacías o ya llenas de bebidas se transportan desde la fábrica a los centros de distribución y tiendas. La distribución implica el uso de camiones o barcos, y en ocasiones, transporte aéreo.
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    Uso

    Uso
    Durante esta fase, el consumidor compra y utiliza la botella para consumir el líquido en su interior. En muchos casos, las botellas de plástico PET se utilizan como envases desechables, aunque también pueden ser reutilizadas temporalmente antes de desecharse. Su periodo de uso suele ser corto, especialmente si están diseñadas para un solo consumo.
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    Gestión de residuos

    Gestión de residuos
    Una vez que la botella ha cumplido su propósito, se desecha. Aquí es donde el manejo de residuos es crucial. Si la botella es reciclada, se recoge, limpia y tritura para luego transformarse nuevamente en pellets que pueden utilizarse para hacer nuevas botellas u otros productos plásticos. Sin embargo, una gran cantidad de botellas de plástico termina en vertederos o, peor aún, en el ambiente, donde tardan cientos de años en degradarse, afectando gravemente a los ecosistemas.