10 poemas de Pablo Neruda

  • AMOR

    AMOR
    Mujer, yo hubiera sido tu hijo, por beberte
    la leche de los senos como de un manantial,
    por mirarte y sentirte a mi lado y tenerte
    en la risa de oro y la voz de cristal.
  • El Padre

    El Padre
    Tierra de sembradura inculta y brava,
    tierra en que no hay esteros ni caminos,
    mi vida bajo el sol tiembla y se alarga.
  • El nuevo soneto a Elena

    El nuevo soneto a Elena
    Cuando estés vieja, niña (Ronsard ya te lo dijo),
    te acordarás de aquellos versos que yo decía.
    Tendrás los senos tristes de amamantar tus hijos,
    los últimos retoños de tu vida vacía...
  • El pueblo

    El pueblo
    Pueblo, eres triste y gris. Tienes las calles largas,
    y un olor de almacén por tus calles pasea,
    El agua de tus pozos la encuentro más amarga.
    Las almas de tus hombres me parecen más feas.
  • Poema 1

    Poema 1
    Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos,
    te pareces al mundo en tu actitud de entrega.
    Mi cuerpo de labriego salvaje te socava
    y hace saltar el hijo del fondo de la tierra.
  • DEVUÉLVEME

    DEVUÉLVEME
    DEVUÉLVEME la grande rosa la sed traída al mundo
    a donde voy supongo iguales las cosas
    la noche importante y triste y ahí mi querella
    barcarolero de las largas aguas cuando
    de pronto una gaviota crece en tus sienes mi corazòn está cantando
    márcame tu pata gris llena de lejos
  • El tigre

    El tigre
    Te acecho entre las hojas
    anchas como lingotes
    de mineral mojado.
  • Si tú me olvidas

    Si tú me olvidas
    Piensa que en ese día,
    a esa hora levantaré los brazos
    y saldrán mis raíces a buscar otra tierra.
  • Soneto XXVII

    Soneto XXVII
    Desnuda eres tan simple como una de tus manos,
    lisa, terrestre, mínima, redonda, transparente,
    tienes líneas de luna, caminos de manzana,
    desnuda eres delgada como el trigo desnudo.
  • Desnuda eres tan simple como una de tus manos.

    Desnuda eres tan simple como una de tus manos.
    Desnuda eres pequeña como una de tus uñas,
    curva, sutil, rosada hasta que nace el día
    y te metes en el subterráneo del mundo
  • Bibliografía