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Mar 13, 1516
Ascenso de Carlos I al trono.
A principios del siglo XVI, el nieto de los Reyes Católicos, Carlos I, ocupó el trono de la monarquía hispánica e instauró la dinastía llamada de Habsburgo o de los Austrias. -
1520
Revuelta de las Comunidades
Entre 1520 y 1521 estalló la revuelta de las Comunidades en varias ciudades de Castilla (Toledo, Segovia, Ávila o Burgos).
Hidalgos castellanos, artesanos y comerciantes protestaron por el aumento de los impuestos propuesto por el rey Carlos I para conseguir ser elegido emperador alemán y por su falta de respeto a las leyes del reino. El ejército de los comuneros fue derrotado por las tropas de Carlos I en Villalar (Valladolid) el 23 de abril de 1521. -
1520
Revuelta de las Germanías
Fue una revuelta contra los nobles protagonizada por los gremios de artesanos y por los campesinos que pedían el acceso a los cargos municipales, la mejora de los arrendamientos campesinos y el fin de los abusos de los más poderosos. Ante esta situación, Carlos I se alió con la nobleza y las tropas del rey acabaron con los últimos focos de resistencia en 1523. Estalló en la Corona de Aragón pero los acontecimientos más violentos y graves sucedieron en Valencia y en Mallorca. -
1556
Nueva etapa política para los Austrias.
Felipe III y sus sucesores renunciaron a ejercer personalmente el gobierno, que pasó a estar controlado por validos, es decir, ministros todopoderosos que gozaban de la absoluta confianza del rey y que influían en sus decisiones. -
1566
La rebelión de Flandes
Ocasionada por el descontento a causa de los fuertes impuestos que exigió y por el conflicto religioso. El malestar provocó un fuerte sentimiento nacionalista que acabó en una sublevación en 1566 dirigida por Guillermo de Orange.
La presencia de los tercios españoles no consiguió acabar con el problema y, al final, los Países Bajos se dividieron en dos zonas: el norte protestante (Holanda) y el sur católico y bajo dependencia española. -
1571
Batalla de Lepanto.
Para frenar la expansión musulmana por el Mediterráneo, Felipe 2 organizó una gran flota aliada, junto con el papa y Venecia, que se enfrentó a los turcos, a los que derrotó en la batalla de Lepanto. -
1581
Anexión de Portugal.
Felipe II consideró que tenía derecho a ocupar el trono portugués, y lograrlo supondría un importantísimo objetivo político, como era la reunificación de dos grandes imperios: España y Portugal. Pero para alcanzarlo era necesario imponer los derechos sucesorios sobre sus rivales. La corona de Portugal tenía entonces muchos candidatos, pero de todos ellos ninguno con tantas razones de sangre como el rey de España Felipe II, tío del difunto monarca y nieto del rey don Manuel. -
La Armada Invencible.
Felipe II envió una gran flota de barcos de guerra, conocida como la Armada Invencible, contra Inglaterra que prestaba su apoyo a los protestantes y que atacaba a los barcos españoles que comerciaban con América.
Esta gran flota acabó destruida por un temporal cerca de las costas inglesas -
La expulsión de los moriscos.
Durante el reinado de Felipe III se produjo la expulsión de los moriscos entre 1609 y 1613.
Primero se deportaron a los moriscos del reino de Valencia, los más numerosos, y de la Corona de Castilla, y en 1610, a los de Aragón y Cataluña.
A partir del otoño de 1609, tras la orden de expulsión dictada por Felipe III, salieron de los reinos hispánicos más de 270.000 moriscos, un 4% de la población total, que se instalaron en su mayoría en la costa del norte de África. -
Guerra de los Treinta Años.
La guerra de los Treinta Años fue una guerra librada en la Europa Central (principalmente el Sacro Imperio Romano Germánico) entre los años 1618 y 1648, en la que intervinieron la mayoría de las grandes potencias europeas de la época. Esta guerra marcó el futuro del conjunto de Europa en los siglos posteriores -
El Corpus de Sangre.
A lo largo del siglo XVII, las guerras contra las potencias europeas consumió grandes cantidades de recursos económicos para hacer frente a los cuantiosos gastos provocados por dichas guerras y empobreció a la población en Castilla. El conde-duque Olivares, valido de Felipe IV, intentó reclutar más soldados y aumentar los impuestos en el resto de los territorios hispánicos, pero sus exigencias acabaron provocando el levantamiento en 1640 de Andalucía, Cataluña y Portugal. -
Fin de la dinastía de los Hasburgo.
Tras morir Carlos II sin descendencia, se dio lugar a un conflicto sucesorio entre los partidarios del candidato francés (el futuro Felipe V de Borbón) y del austriaco (Carlos de Austria). El triunfo de Felipe de Borbón, que era nieto de Luis XIV y de María Teresa de Austria, significó el fin de la dinastía de los Hasburgo en el trono hispánico.
